Green Hell

Parada en Teatinos con Alameda logro oír el primer platillo de Ulrich en Last Caress. Le han cantaron Die die my darling a las amarillas y se ha instaurado un silencio casi funerario por su desaparición.
Más que una metrópolis esto parece Jardín del Edén, tanta oruga deslizándose por las calles, paraderos con forma y colores onda Torres de Paine, aparte de las flores que circulamos por las aceras... sí, arto cagado está el reino vegetal.

He caído nuevamente a esta urbe, abro mi ventana, respiro, la cierro. Está vez nos son cinco, si no tres los cigarros que me fumé al hilo.

En la calle las extraño, me hacen falta esas abejas asesinas que ronroneaban en los oídos y los dejaban peor que escuchar Kudai a capela. Además de ese tono amarillo pato, que tan ideal era para relajarse y alcanzar la armonía.

¡¡¡ Quien puede vivir así aquí, Dios mío este gobierno.!!!

Pero lejos lo más mejor...el Ministro Espejo, un primor.


Perdonen el desorden de la columna derecha, es que me cambie a Blogger Beta. Otra muestra de un cambio-cagaso. Si alguien sabe como arreglar esto, en mi perfil está mi emilio o comente aquí.

Por su atención muchas gracias